Actualización Del Recaudador De Impuestos Dariel Fernandez, Sobre Incidente Del Candelabro De Hanukkah Y Cómo Un Buen Samaritano Reflejó La Fortaleza Y La Unidad De Nuestra Comunidad

Anoche, una persona intentó destruir el candelabro de Hanukkah que encendimos por primera vez en la historia de la Oficina del Recaudador de Impuestos del Condado de Miami-Dade, apenas días después de iniciar lo que ahora será una tradición anual para honrar la fe, la unidad y las diversas comunidades a las que servimos con orgullo.

Esto fue más que un acto de vandalismo. Fue un ataque intencional contra un símbolo de esperanza, perseverancia y el significado de Hanukkah. La estructura pudo haber sido derribada y dañada, pero el significado que representa permanece intacto.

Agradezco a las fuerzas del orden por su rápida respuesta. La persona responsable ha sido identificada, detenida y formalmente acusada. Esta oficina continuará cooperando plenamente con las autoridades conforme avanza el proceso legal.

Quien haya cometido este acto fracasó. No rompió ni romperá jamás nuestro espíritu ni nuestro compromiso con los residentes del Condado de Miami-Dade. Se puede derribar una estructura, pero no se puede apagar lo que representa. La única manera de combatir la oscuridad es con luz, y viviré conforme a ese principio cada día de mi vida. Lo ocurrido anoche solo refuerza mi determinación.

Volveremos a encender el candelabro. Repararemos lo que fue dañado. Y continuaremos esta hermosa tradición no solo el próximo año, sino todos los años, con mayor fortaleza y unidad que nunca. Este acto no nos intimida. Nos impulsa a defender nuestros valores con aún mayor determinación.

Me mantengo firmemente solidario con la comunidad judía y con todos los residentes del Condado de Miami-Dade que creen en la dignidad, el respeto y la libertad de practicar su fe sin temor.

También quiero agradecer al buen samaritano que se detuvo y levantó nuevamente el candelabro. En un momento en el que alguien intentó dividirnos, esta persona eligió ayudar, cuidar y hacer lo correcto. Su acción refleja el verdadero corazón del Condado de Miami-Dade: una comunidad que permanece unida y se apoya mutuamente.

Lo que hizo este buen samaritano fue simple, pero poderoso. Al levantar el candelabro, elevó nuestro ánimo. Demostró que la bondad es más fuerte que el odio y que, en nuestra comunidad, las personas siempre dan un paso al frente cuando más importa.

Nuestra responsabilidad en el servicio público va más allá de prestar servicios. Incluye proteger los valores que definen quiénes somos como comunidad.

Este candelabro es más que una exhibición. Es una declaración de que aquí vive la luz, aquí vive la unidad y aquí vive la fe. Y sin importar quién intente derribarlo, la luz siempre prevalecerá. Los actos de antisemitismo y odio no tienen cabida en el Condado de Miami-Dade.  Ni ahora ni nunca. Feliz Hanukkah. Que Dios bendiga al Condado de Miami-Dade. Que Dios bendiga a los Estados Unidos de América.

Dariel Fernandez

Recaudador de Impuestos, Condado Miami-Dade